Hemos dejado unos cuantos ejemplares de Rantifuso 11 y 10 en la mesita de fanzines de Café Molar.
Enviado por Redacción el 2. Junio 2014 - 11:53
Un comic que narra la detención de una activista de Stop Desahucios se presenta en el Saloncito de comic de Móstoles
A mediados del siglo XIX, en la novela Les miserables, el francés Victor Hugo (libro II, capítulo VI) narraba las desventuras de Jean Valjean, que fue condenado a pasar cinco años en la prisión de Tolon por robar un pan a Maubert Isabeau, panadero de Faverolles. Este pasaje fue capaz de incendiar los corazones de los lectores y hacerles indignarse por una situación que en Francia —y fuera de Francia— se producía con cotidiana brutalidad: la injusticia de las disposiciones legales, capaces de tratar a los pobres como delincuentes por el mero hecho de ser pobres. En el mismo siglo, también en Francia, Alexandre Dumas (Le père) también escribió acerca de otra injusticia que acabó con una pena de prisión: la de Edmund D’Antès por el falso testimonio dado por tres notables de Marsella.
Sin embargo, no podemos ampararnos en el pensamiento consolador de que esas eran cosas que ocurrían en el siglo XIX y que hoy en día todo ciudadano tiene garantizados sus derechos. Antes bien, sufrimos una época de retrocesos que nos acercan peligrosamente a la situación que padecieron Jean Valjean o D’Antès. El caso de Patricia es quizás uno de esos ejemplos.
Patricia es una ciudadana madrileña que participó en una acción de Stop Desahucios para impedir que se expulsase de su vivienda a una familia de cinco miembros (madre, abuela y tres niños), y que fue identificada por la Policía Municipal. Horas más tarde, fue acusada de una agresión que nadie vio y tras la denuncia, se enfrenta a tres años de prisión. El caso completo puede leerse en la página Solidaridad con Patricia.
Una de las acciones para dar a conocer este caso es el comic autoeditado también tituladoSolidaridad con Patricia, en el que se narra de forma clara y sencilla el calvario que ha tenido que sufrir Patricia con su detención y la angustia por la petición del fiscal. En la presentación de estecomic en el patio del CSOA La Casika —también amenazado de desalojo—, más de 90 personas se dieron cita el lunes 2 de junio bajo la sombra de su morera. Las personas que salían de la reunión de Stop Desahucios Móstoles también se quedaron para expresar su apoyo a Patricia.
La presentación del comic estuvo a cargo de integrantes del colectivo de apoyo por un lado, y por otro el dibujante y responsables del fanzine Rantifuso, grandes defensores de la autopublicación. Se dedicó el tiempo a poner en conocimiento el caso de Patricia y de la solidaridad activa que ha recibido el colectivo. Lo que le ha pasado a Patricia —nos recuerdan— podría haberle pasado a cualquiera que estuviera en ese desahucio o en cualquiera de los que se intentan parar en todo el Estado español, que por desgracia no son pocos.
La librería Delirio, siempre preocupada por la conjunción entre el comic y la justicia social, pagó los treinta fanzines que trajeron los ponentes para regalarlos al público asistente. No obstante, los participantes no quisieron quedarse atrás en lo relativo a la generosidad. Todas las personas dejaron el dinero de su ejemplar en la hucha. No tenían por qué haberlo hecho y sin embargo, lo hicieron. Una muestra solidaria de este calado justifica ya por sí sola la celebración de todo el extenso Saloncito de comic.
El comic puede leerse on-line en Isuu:http://issuu.com/rantifuso/docs/comic_solidaridad_patricia